Echando nuestras redes Lucas 5:4;

Hay algunos pasajes en la Biblia que nos Habla sobre esta temática. “Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red,  que echada en el mar,  recoge de toda clase de peces.” Mateo 13:47: “Y les dijo: Venid en pos de mí,  y os haré pescadores de hombres.” Mateo 4:19: “Andando Jesús junto al mar de Galilea,  vio a dos hermanos,  Simón,  llamado Pedro,  y Andrés su hermano,  que echaban la red en el mar;  porque eran pescadores.” Mateo 4:18; Te pregunto esta mañana: ¿Qué estás haciendo con tu red? ¿Qué has hecho con la red que Dios te ha dado? Dios nos ha dado una red y nos ha mandado a pescar hombres.

El escenario de este milagro de Jesús fue el Lago de Genesaret, conocido también como el mar de Tiberíades o mar de Galilea. Es de agua dulce. Tiene aproximadamente 30 Kilómetros de largo por 13 de ancho. Capernaún y Besaida en los días de Jesús eran centros de la industria pesquera. Tenía unos 208 Mts. Por debajo del mediterráneo. Existen unas 22 variedades de peces. A veces se han observado bancos de estos peces de hasta 4.000 metros. De los treinta y tres milagros que Jesús realizó diez y ocho lo hizo en este mar de Galilea – lago de Genesaret.

Mateo 4:21; dice: “Pasando de allí,  vio a otros dos hermanos,  Jacobo hijo de Zebedeo,  y Juan su hermano,  en la barca con Zebedeo su padre,  que remendaban sus redes;  y los llamó.”

Lucas 5:2; dice “Y vio dos barcas que estaban cerca de la orilla del lago;  y los pescadores,  habiendo descendido de ellas,  lavaban sus redes.”

Entonces encontramos que hay quienes están echando la red, unos están remendando la red y otros están lavando la red. Y hay aquellos que “y dejando sus redes, le siguieron.” Marcos 1:18;

PREGUNTO ¿Qué estás haciendo con tu red? ¿La estás remendando? ¿La estás lavando? ¿La estás echando? Entendemos que la red hay que cuidarla, hay que remendarla. No puedes echar una red llena de agujeros, porque los peces se van a escapar por los agujeros. Hay que lavarlas porque si no haces se va a dañar, se va a podrir. Pienso que hay una gran cantidad de creyentes sino la mayoría que tienen sus redes colgadas como adornos, o la convirtieron en hamacas. Tal vez en algún lugar del patio, descuidada, abandonadas. Espero hermano que no se te haya perdido la red.

I UNA EXCUSA MUY COMÚN “Respondiendo Simón,  le dijo: Maestro,  toda la noche hemos estado trabajando,  y nada hemos pescado…” Lucas 5:5;   Lavar las redes era una tarea que se realizaba después de una noche de pesca. Durante la noche los peces se acercaban más a la superficie en busca de alimentos, en el día se iban a lo más profundo del lago. Toda la noche hemos estado trabajando, estamos cansados… Humanamente ya hicimos todo lo que sabemos. (Pedro era un hombre experto en la Pesca) y nuestra barcas están vacías. No hemos pescado nada. Muchos creyentes han sentido cansancio han echado las redes, es decir han tratado de pescar pero sus redes salen vacías. Tanto métodos Evangelísticos y nada… La Biblia dice: “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos”. Gálatas 6:9;

II LA CLAVE PARA LA PESCA ES LA OBEDIENCIA. “Cuando terminó de hablar,  dijo a Simón: Boga mar adentro,  y echad vuestras redes para pescar.” Lucas 5:4; Hay que moverse donde Dios se está moviendo… Donde Dios nos presente la Oportunidad, donde nos muestra una necesidad. Hay que apoyar el esfuerzo de la iglesia por alcanzar almas para Cristo… Hay que dejar la comodidad de la playa o tierra firme. (MI templo) y bogar mar adentro, enfrentando los temores, Las posibles tormentas que se levante seguros que aquel que nos comisiona no permitirá que nuestras barcas naufraguen, porque señores regresaremos trayendo las gavillas “Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. 6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas”. Salmos 126:5-6;

III EL RESULTADO DE LA OBEDIENCIA ES LA BENDICIÓN, (LA COSECHA) “Y habiéndolo hecho,  encerraron gran cantidad de peces,  y su red se rompía.7 Entonces hicieron señas a los compañeros que estaban en la otra barca,  para que viniesen a ayudarles;  y vinieron,  y llenaron ambas barcas,  de tal manera que se hundían.” Lucas 5: 6-7; El obedecerle a Dios nos lleva a ver sus maravillas. Cuando Pedro decidió confiar en Jesús, su barca se llenó tanto que tuvo que pedir a otra barca para llenarla. Sueño con el día en que Dios nos de la cosecha de almas en que tengamos que pedir ayudas a otros para atender a los nuevos creyentes, contratar a nuevos pastores, misioneros. Sueño en que la iglesia de Cristo esté preparada para que cuando las personas se conviertan, los miembros de las congregaciones que se han preparado y digan pastor yo estoy listo para consolidar, para formar grupos, células… Se levante líderes pastorales…

IV LOS MILAGROS DE JESÚS NOS LLEVA A RECONOCER NUESTRA LIMITACIONES. “Viendo esto Simón Pedro,  cayó de rodillas ante Jesús,  diciendo: Apártate de mí,  Señor,  porque soy hombre pecador.” Lucas 5:8; “porque la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él y todos lo que estaban con él” Lucas 5:9; Aún con nuestras fallas Dios nos puede utilizar, pero el ver el accionar de Dios nos debe llevar a consagrarnos a Él y seguir echando las redes.

V LA ENSEÑAN DE JESÚS CONFIRMADA. Juan 21:1-11; “después de esto Jesús se manifestó otra vez a sus discípulos junto al mar de Tiberias ; y se manifestó de esta manera: 2 estaban juntos Simón Pedro, Tomas llamado el dirimo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos de sus discípulos 3 Simón Pedro les dijo :Voy a pescar, ellos le dijeron vamos nosotros también contigo fueron y entraron a una barca y aquella noche no pescaron nada:4 “Cuando ya iba amaneciendo Jesús se presentó en la playa ; mas los discípulos no sabían que era Jesús” 5 “y les dijo: hijitos tenéis algo de comer y le respondieron: No” 6 “él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca y hallareis. Entonces la echaron y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces” 7 “entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: ¡Es el Señor! Simón Pedro cuando oyó que era el Señor se ciñó la ropa y se echó a mar” 8 “Y los otros Discípulos vinieron con la barca arrastrando las red de peces pues no distaban de tierra sino como doscientos codos 9 al descender a tierra vieron brazas puestas, y un pez encima de ellas y pan”. 10“Jesús les dijo traed a los peces que acabéis de pescar 11 y subió Simón Pedro, y saco la red a tierra llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun así siendo tantos no se rompió”.

Jesús le recordó a Pedro que siempre tenía que tirar su red confiando en su palabra, que siempre habrían resultado. En hechos 2:14-41; Pedro echó la red y ganó 3.000 almas para Cristo… V. 41 “Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas”. Pedro entendió y cumplió con el llamado de su Señor y Salvador.

Personalmente creo que necesitamos los que remiendan las redes, es decir los que cuidan para que las almas no se “escapen” apenas llegan al templo. Son aquellos que están listos para consolidar, enseñar, discipular, mostrarle el amor de Dios y alimentarlos con las primeras enseñanzas, se bauticen, crezcan espiritualmente y se conviertan también en pescadores de almas.

Necesitamos los que lavan las redes. Aquellos que con sus oraciones piden a Dios santidad para la iglesia, autoridad, poder y buen testimonio por los que evangelizan, los que oran por los nuevos convertidos para que Dios le libre de tentaciones, de ataques del enemigo, del mundo, de las pasiones, de todo aquello que pueda contaminar el corazón del recién convertido.

Y naturalmente necesitamos principalmente aquellos que echan la red y que pescan.

Pero sin duda resalta la gran verdad de que todo buen pescador sabe echar su red, (Evangelizar) la sabe remendar (Consolidar) y la lava (Cuida su testimonio) después de una jornada de pesca.

Conclusión.

Entonces: ¿Qué estás haciendo con tu red?

¿La estás remendando?

¿La estás lavando?

¿La estás echando?

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